

Secciones
Servicios
Destacamos
La cabalgada de Jonas Abrahamsen (Uno-X) habría sido muy del gusto del general De Gaulle. Épica, bellísima, abocada al fracaso. Durante todo el día, ... el Tour no ahorró referencias al padre de la V República con motivo de la llegada de la carrera a Colombey-les-deux-Églises, el pueblo donde el pelotón se detuvo en 1960 para saludar al hombre providencial. Se nota que es un momento trascendental para Francia.
Hubo odas de toda clase y hasta dibujaron su cara en un campo de labranza. Menos mal que apareció André Darrigade, 22 victorias de etapa en el club y en muy buena forma a sus 95 años, como se pudo ver en su visita a la Itzulia en abril, para poner las cosas en su sitio. Que sí, que bien, que aquel día pararon a saludar a De Gaulle y «fue un momento especial, bastante fuerte, sobre todo porque era la primera vez que me encontraba con el general... Y la última vez también». Pero que en realidad aquello no fue más que un gesto oportunista. Darrigade recuerda que la carrera pasó por delante de su puerta, pero «si el Tour hubiera transitado a 20 kilómetros de su casa, no estoy seguro de que hubiera venido a vernos». De Gaulle no era precisamente conocido por su afición al ciclismo, ni al deporte en genera, pero nunca dejó pasar una oportunidad de abrazar cualquier manifestación popular que pudiera favorecer su imagen.
El monarca de la V República tampoco habría desaprovechado el triunfo de Biniam Girmay (Intermarché) en su pueblo. Es la segunda etapa que gana, todo un acontecimiento, un hecho sin precedentes. Quienes hicieron un ejercicio de condescendencia con Girmay cuando ganó en Turín ya le conocen. Es una figura, con un contrato millonario y un equipo a su servicio. Ganó bien en Turín y ayer lo hizo aún mejor. Fue una victoria de mucha clase, elegante, mano a mano con el considerado mejor velocista antes del inicio del Tour, Jasper Philipsen (Alpecin), que todavía no conoce la victoria.
El primer triunfo en una grande y su puesta de largo en la alta sociedad fue en el Giro de hace dos años. Ya había ganado la Gante-Wevelgem, pero esa es una carrera para entendidos. El Giro es para el gran público. Que Girmay ganara allí primero era inevitable, por el peso inexorable de la historia y de los mapas.
En Eritrea se anda en bici por los italianos. Mientras los ses y los ingleses se movían por África en coches y camiones, los italianos, que iban con lo puesto, se desplazaban en bici y sin querer resolvían un problema cultural. Andar en bicicleta ya no era cosa de negros pobres, sino de blancos ricos. Una cuestión de prestigio. En los años 30 ya había campeonatos nacionales y en 1946 se disputa la Vuelta a Eritrea, que gana el italiano Nunzio Barilá. Sin embargo, en el campeonato nacional de 1937 se había impuesto Ghebremariam Ghebru, por delante de todos los colonizadores transalpinos, un hito que aún se recuerda en el país.
Girmay, que firmó un contrato importante hasta 2026 tras ganar en el Giro, logró ayer la 15ª victoria de su carrera y, hasta el momento, es el sprinter dominador del Tour, el único que ha ganado dos etapas. Viste el maillot verde de la clasificación por puntos, que quiere llevar hasta Niza.
La jornada fue tranquila para los favoritos de la general, a la espera de la jornada del domingo, una de las que más miedo provoca en los cuarteles generales de los equipos. Una etapa donde no se puede ganar el Tour, pero sí perderlo. Con salida y llegada en Troyes -el punto más al norte de esta edición- los ciclistas afrontan 14 sectores de caminos de tierra, para una distancia total de 32 kilómetros, que son muchos,
Es parte del trazado del Tro Bro Leon, el equivalente francés a la Strade Bianche. Hay algún tramo, como el de Bar, mediada la etapa, que incluye unas rampas del 15%. La labor de los equipos puede resultar clave en caso de que algún favorito decida correr al ataque.
La del domingo es la última etapa de la primera fase del Tour, que comenzó en Italia. Se ha pasado la primera ración de los Alpes, se ha disputado una de las dos cronos y hoy se afronta la etapa del sterrato. Cuando el ganador -Girmay volverá a a estar en todas las quinielas, dado su estado de forma e inspiración- cruce la meta de Troyes podrá hacerse un primer análisis, antes de la jornada de descanso. El lunes habrá material para pensar. En el Tour y en Francia en general.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Encuentran a una mujer de 79 años muerta desde hacía varios días en su domicilio
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
No te pierdas...
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.