Las tendencias otoñales vistas en pasarela

Pero, la pregunta del millón: ¿Cuáles son las tendencias de la próxima temporada primavera-verano 2025? Las firmas italianas nos han demostrado que la artesanía sigue muy presente, aunque acompañada de innovación, vanguardismo y singularidad. Entre las corrientes destaca la apuesta por los looks limpios y los diseños etéreos. Una mujer femenina, armónica, minimalista y sofisticada se impone sobre cualquier otra variante.

El negro, los 'prints' florales y el satén han dominado las colecciones a través de vestidos de noche y sastrería, destacando fundamentalmente por su elegancia. Las transparencias y los encajes también han sido protagonistas, especialmente en piezas como los 'trench' y los LBD.

Otro punto clave ha sido el uso de drapeados (sí, siguen en boga) en una amplia variedad de 'outfits', así como la incorporación de lencería para looks 'streets'. Colecciones sencillas, con fuerza y poderosas.

Sabato de Sarno, director creativo de Gucci, también ha presentado una espectacular colección repleta de básicos y tejidos nobles. Las minifaldas, trajes de chaqueta, superposiciones y tocados han sido elementos recurrentes en los estilismos.

Los años sesenta siguen súper vigentes, complementados por pantalones de sastre 'oversize' y 'tank tops' holgados. Los vestidos de noche con 'cut outs' y las lentejuelas han sido diseñados para las más atrevidas. Piezas hechas para lucir las piernas con confianza y empoderamiento.

Miuccia Prada y Raf Simons han logrado construir uno de los desfiles más aplaudidos de la Semana de la Moda de Milán gracias a sus estilismos compuestos por abrigos y vestidos con toques de inspiración masculina. Además, las piezas galácticas creadas apuntan hacia el futurismo maridado con el presente. El binomio es real.

Y como no podía ser de otra forma, Fendi ha vuelto a sorprender y a enamorar gracias a una colección absolutamente exquisita y delicada. Su director creativo, Kim Jones, ha basado su trabajo en cinco ejes fundamentales: transparencias, bordados, superposiciones, mezcla de tejidos y asimetrías.

Con esto, las casas italianas han vuelto a demostrar que la Semana de la Moda de Milán es un huracán de poderío y creatividad al alcance de los más grandes del sector. Un soplo de aire fresco para una industria en proceso de transformación