Pasaia

Pasaia reconoce por unanimidad en pleno el carácter jurídico de Bokale

Bokale se creó en el año 2011 en el contexto del diseño y desarrollo del primer Plan Estratégico del Euskera de la localidad. Desde entonces, se han estructurado mesas de trabajo y foros de encuentro formados por diferentes agentes locales y se ha construido una «sólida» red de participación.

En la actualidad, en este consejo participan tanto la técnica del Departamento municipal de Euskera como la concejala delegada de Euskera, Laura Ré, junto con agentes y representantes de los diversos sectores del municipio. Entre estos se incluyen los representantes de iniciativas populares de la actividad cultural vasca (uno por cada uno de los distritos de la población), los de los distintos euskaltegis de la localidad (euskaltegi municipal y AEK Txirrita), los de los tres centros escolares existentes (Karmego Ama, Pasaia-Lezo Lizeoa y La Anunciata), los de la asociación de comerciantes y hosteleros Laurak Bat, los de la mesa de trabajo de ocio y deporte, los del mundo laboral y los de la mesa de juventud.

La función de este consejo es «la reflexión, el desarrollo y el seguimiento de las estrategias y políticas públicas para la normalización del uso del euskera», de acuerdo con las líneas recogidas en el Plan Estratégico del Euskera.

Asimismo, se le reconoce legitimidad a esta comisión para tomar las decisiones que considere oportunas en materia de políticas lingüísticas.

Por tanto, esta estructura, centrada en la participación y la colaboración, permite «hacer oír de forma organizada y eficaz la voz de la ciudadanía y de los diferentes agentes». Así lo manifiestan desde el Consistorio a través de una nota de prensa.

Laura Ré Lozano, concejala de Euskera, explica que «Bokale tiene una trayectoria histórica en nuestro pueblo». «Podríamos decir sin pelos en la lengua que se trata del espacio más fructífero para el fomento del euskera en Pasaia. Por ello, y como reconocimiento, nos parecía importante darle forma jurídica, convirtiéndolo en un órgano municipal», declara Ré.

Además, esta medida «es indicativa del modelo de política en la que creemos, ya que la propia Bokale es también un espacio de participación ciudadana», añade.

La concejala destaca que en los últimos meses «en el contexto de la ofensiva contra el euskera que se está imponiendo, es más importante que nunca dar pasos sólidos, valientes y valiosos a favor del euskera desde la istración pública, y este es uno de ellos».

Según informan desde el equipo de Gobierno municipal que encabeza el alcalde, Teo Alberro, el reglamento entrará en vigor pasados un total de quince días hábiles de su publicación en las páginas del Boletín Oficial de Gipuzkoa. A partir de ese mismo momento, una vez que Bokale se convierta en una estructura oficial, «se va a reconocer y apoyar institucionalmente el trabajo por el euskera».

Del mismo modo, a través de la participación ciudadana, el Ayuntamiento seguirá construyendo las políticas lingüísticas «desde el pueblo y para el pueblo».