PNV y EH Bildu abandonan el Senado como rechazo al «beligerante discurso» del PP sobre el uso del euskera

La portavoz del PNV, Estefanía Beltrán de Heredia, ha lamentado que «el euskera fue perseguido por la dictadura. Y ahora, en plena democracia, resurgen voces de la derecha que, apelando a su centralidad, intentan arrinconarnos». Esa ha sido su respuesta a las palabras de Serrano, quien ha dicho a los «independentistas que quieren convertir esta cámara en un instrumento de su proyecto plurinacional que no existe». «Se están aprovechando de un presidente que es capaz de vender a su familia si hace falta», ha criticado. Y ha continuado elevando el tono: «En el año 2025 a niños y familias se les aislan por pretender hablar castellano en el colegio. ¡Esto ocurre!», ha señalado ante las críticas de los senadores catalanes desde la tribuna.

Pero no ha bastado con todo esto y Serrano ha seguido echando leña al fuego, o gasolina. «Cuando Cerdán descansa de montar cloacas en Waterloo en qué habla, ¿se pone pinganillo? ¿Cuando PNV, EH Bildu y Junts salen fuera a seguir preparando su hoja independentista usan traducción simultánea?», ha preguntado. «Este debate va de sucumbir a las peticiones de los nacionalista», ha asegurado, algo que, según ha afirmado, no hará el PP. Y ha añadido que usar un traductor «cuando todos hablamos una lengua común» es «hacer el ridículo».

En ese momento varios senadores han encarado la escalinata para salir del hemiciclo mientras le han dicho a Serrano que tiene mucha cara. «No dependemos de ustedes. Vayanse», les ha espetado el popular. Tras terminar su intervención, Serrano se ha dirigido a la bancada del PP, que le ha aplaudido con énfasis, mientras los asientos de gran parte del hemiciclo se han quedado vacíos como rechazo al discurso que ha protagonizado el senador del PP.

Este episodio no hace más que echar más leña al fuego a las maltrechas relaciones entre PNV y PP, que se han enzarzado virulentamente en las últimas semanas a cuenta del euskera. Apenas han pasado cinco días desde que la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, se levantase de la Conferencia de Presidentes celebrada en Barcelona cuando el lehendakari Imanol Pradales intervino en euskera. Y no fue solo ella quien protagonizó el desplante, otros presidentes autonómicos del PP tampoco se pusieron los pinganillos para entender a Pradales. El lehendakari fue tajante ante el «numerito» de Ayuso: «Es una forma intolerante y monocolor de entender la sociedad, un pensamiento retrógrado que nos hace recordar momentos oscuros».

A finales del mes pasado el PNV ya denunció las «maniobras sucias» del PP para obstaculizar que el euskera sea oficial en la Unión Europea y responsabilizó a directamente a los populares de que varios países de los Veintisiete mostraran sus dudas legales, financiera y políticas al respecto.

El grupo jeltzale ha abandonado este miércoles el hemiciclo junto al resto de representantes de las formaciones que han presentado una propuesta alternativa de reforma del Reglamento del Senado -ERC, EH Bildu, PNV, Junts, BNG y senadores del grupo de Izquierda Confederal- que ha sido tumbada por el PP y que, en palabras de Beltrán de Heredia, tiene como único objetivo adaptarlo a sus necesidades y poder responder a sus urgencias políticas para ejercer de contrapoder al Gobierno central.

«Tratan de transitar hacia un sistema bicameral simétrico, de tal manera que, superando incluso la Constitución, el Senado tenga la última palabra en el proceso legislativo, pudiendo bloquear la acción del Gobierno, e incluso otorgándole capacidad fiscalizadora sobre el Congreso», ha criticado la portavoz del PNV.

Además, ha denunciado que «la estrategia de la derecha para tratar de blindar un Estado monocolor, uniforme, unicultural y unilingüe». Beltrán de Heredia recordado la persecución que sufrió el euskera durante la dictadura y ha añadido que la actual negación del Estado plurinacional y plurilingüe se debe a «una concepción ideológica centralizadora, uniformizadora, del Estado español: un Estado, una realidad nacional, una lengua», ha resumido, a la par que ha demandado que el Senado respete y sea reflejo de esa diversidad.

«Las lenguas son la expresión de la cultura, de la historia individual y colectiva y de la identidad de un pueblo. Tratar de invisibilizar la lengua es la más clara manifestación de que quieren invisibilizar a un Pueblo, pero aquí estamos reclamando voz para nuestras lenguas, para el euskera, porque es una cuestión de justicia, de respeto a la diversidad cultural y a la historia de cada pueblo», ha resaltado Beltrán de Heredia.