Satse, ELA, LAB, CC OO, UGT y ESK piden la dimisión de Sagardui y llaman a manifestarse por la sanidad pública

De las palabras a la acción. La polvareda provocada por las declaraciones de la consejera de Salud, Gotzone Sagardui, advirtiendo a los ciudadanos de que deberán «desplazarse más» para ser atendidos en centros sanitarios públicos no solo ha concitado el rechazo sindical en forma de declaraciones censurando esta afirmación, sino que han pasado a los hechos convocando para el 22 de junio concentraciones y encierros en los centros de salud, además de una manifestación en Bilbao para el domingo día 26 en contra «del desmantelamiento» de la sanidad pública. Además, han solicitado su dimisión ante lo que consideran «la incapacidad» de la consejera de plantear medidas «que no no supongan un recorte de derechos para profesionales y ciudadanía».

Los sindicatos Satse, ELA, LAB, CCOO, UGT y ESK se han reunido este viernes en Bilbao y han llamado a manifestarse para denunciar que el Gobierno «quiere desmantelar y precarizar Osakidetza» tras escuchar las declaraciones de Sagardui, que han calificado de «muy graves». A juicio de las centrales, aunque estas manifestaciones «no son nuevas, han puesto de manifiesto la voluntad del Gobierno Vasco de desmantelar la Atención Primaria y precarizar Osakidetza. Y, por tanto, seguir dando pasos por la privatización».

Por ello, han decidido manifestarse el 26 de junio en Bilbao, a partir de las 12.00 horas, en defensa de la sanidad pública. Paralelamente, el 22 de junio, realizarán concentraciones-encierros en centros de salud, cuyo horario se recorta en verano.

Además, solicitan la dismisión de Sagardui como máxima responsable de la sanidad pública vasca ante lo que consideran «la incapacidad» de la consejera «de plantear medidas, ni a corto ni a largo plazo, que no supongan un recorte de derechos para profesionales y ciudadanía», unido a la «irresponsabilidad» de lo verbalizado. Unos hechos que, a juicio de los sindicatos, «solo puede derivar en su dimisión».

Las centrales han recordado que esta situación «no se ha producido de golpe», y que la falta de profesionales en la Atención Primaria es «consecuencia de decisiones políticas tomadas durante años». Los sindicatos atribuyen a las precarias condiciones laborales, como las dificultades para conciliar, la inestabilidad, la temporalidad, las cargas de trabajo, etcétera la falta de profesionales.

Los sindicatos han recordado que «llevan años diciendo que hacía falta más personal» para hacer frente a las vacantes que iban a surgir. «Esta precarización se da en todas las categorías, incluso en aquellas en las que la escasez de profesionales no existe», aseguran las centrales, que denuncian que el Gobierno Vasco «no ha querido dar respuesta a esta situación».

En el caso de los médicos residentes, censuran que no se haya «hecho nada» para aumentar o al menos plantear ante el el Gobierno de Madrid la necesidad de aumentar su número. «Además, pretende criminalizar a los jóvenes profesionales, manifestando su falta de compromiso. Y todo ello para justificar las graves medidas que quieren adoptar, como el cierre de centros sanitarios o abiertos sí, pero sin servicio médico», critican.

Las centrales también inciden en que para llegar a la media europea en inversión sanitaria pública Euskadi debería invertir 1.674 millones de euros más. «Estamos por detrás de países como Grecia, Estonia o Portugal», censuran, mientras consideran que la «única realidad es que la falta de profesionales se ha convertido en la excusa perfecta para desmantelar la Atención Primaria, porque no hay otro plan alternativo que no sea ese. La única alternativa es cerrar los centros de salud o reducir su personal, aunque el número de enfermos y la carga de trabajo sea la misma».

Así, anticipan que «se precarizarán» tanto las condiciones laborales como el servicio, «porque habrá que mover sistemáticamente a los pacientes, especialmente a los más vulnerables, y se reducirá el servicio de atención».

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