Irun

La Irungo Atsegiña estrena cabezudos con una gran fiesta el próximo sábado

Esos ocho cabezudos que estrenará la Atsegiña «son el resultado de un proceso que comenzó en 2017 con la restauración de los gigantes, y que ahora culmina con la renovación completa de la comparsa». El taller Eskuartean ha sido el encargado de realizar las figuras «tras un riguroso trabajo de documentación en archivos, fotografías y otras fuentes». Desde la Irungo Atsegiña definen el resultado como «una recreación fiel y funcional de los primeros cabezudos de Irun, pensada para devolverles su lugar en el imaginario popular de la ciudad». Esos cabezudos originales que inspiran los nuevos «se crearon en 1897»: llegaron a Irun en el año 1902 «junto con los gigantes, adquiridos por Aquilino Rodríguez».

Los cabezudos que han acompañado a la ciudadanía durante décadas «serán conservados como testimonio de su tiempo», pero expertos determinaron «que su restauración no era viable». Además, «existían dudas sobre su autenticidad respecto a los originales de la comparsa».

La jornada de presentación, abierta a toda la ciudadanía, arrancará a las 11.00 con la salida de la comparsa desde la sociedad Irungo Atsegiña. En este primer tramo participarán también los cabezudos antiguos, en la que será una despedida «cargada de simbolismo y gratitud». A las 11.30, en la plaza San Juan, se celebrará «un acto público de homenaje y traspaso generacional». Los nuevos cabezudos se mostrarán a la ciudadanía en una presentación «con música en directo y una puesta en escena especial». Destaca la presencia de la Banda de Música Ciudad de Irun, recientemente nombrada 'Gigante de Irun' por la Atsegiña, y que «acompañará todo el recorrido del pasacalles y la presentación oficial». De hecho, la Banda «ha sido nombrada madrina oficial de los nuevos cabezudos en agradecimiento a su histórica colaboración con la comparsa y su compromiso con la vida cultural de Irun».

Tras esa presentación oficial, los cabezudos desfilarán por las calles de la parte vieja. El sábado que viene «será un momento muy especial para toda la sociedad», señala su presidente, Jesús Rubio. «Estos cabezudos no son sólo nuevas figuras: son una apuesta por la memoria festiva de Irun, por el respeto a la tradición y por la calidad en las formas. Nos emociona pensar que muchas personas van a encontrarse con ellos por primera vez, y que a partir de ahora formarán parte de la vida colectiva de la ciudad».