Irun

La tecnología creativa se hace un hueco en los sanmarciales

El programa de las fiestas de San Pedro y San Marcial ha tenido su apartado más innovador en los talleres de tecnología creativa que la Asociación Júnior Empresa Mäwa ha celebrado en la plaza Pío XII. Este colectivo de estudiantes de Mondragon Unibertsitatea ha demostrado que las nuevas tecnologías tienen un lado divertido que encaja en contextos festivos como los sanmarciales.

La buena acogida que esta actividad ha tenido superó las expectativas de sus organizadores: «ha venido un montón de gente», contaba Marina Landa, de Mäwa. «La verdad es que no nos lo esperábamos», pero el público hizo cola frente al stand de la plaza Pío XII, donde se ofrecían dos opciones: grabados en madera mediante tecnología láser y elaboración de chapas. La primera alternativa fue la que más interés suscitó, ya que el resultado lo merecía: en círculos de madera se ofrecía la opción de grabar un diseño al gusto de cada uno. Aquí no se trataba sólo del resultado, sino de aprender cómo es el proceso: «es muy interesante ver que los chicos y chicas entiendan cómo se hacen, que es uno de los objetivos con los que hemos organizado los talleres. Han mostrado mucho interés y les hemos enseñado cómo funciona el programa de ordenador, la máquina...».

Debido a toda la gente que se acercó al puesto desde el lunes por la mañana, los organizadores acumularon pedidos para realizar más grabados en madera por la tarde. Muchos pidieron escudos de sus equipos deportivos: la Real Sociedad, el Bidasoa... Otros optaron por llevarse su propio nombre grabado en la madera, y también hubo quienes «se han animado a pedirnos diseños de dibujos animados», contaba Marina Landa.

La segunda actividad de los talleres, la elaboración de chapas, fue una opción más sencilla que los propios niños y niñas más pequeños podían realizar, «y también es divertido. Ellos mismos pueden hacer el dibujo que quieran y manejar la máquina con la que se montan las chapas». Muchos de los txikis hicieron dedicados a sus familias, o «dibujos hechos por ellos mismos, además de algunos diseños previos que habíamos traído».

Los jóvenes de Mäwa estaban contentos por la buena acogida que ha tenido la iniciativa. Tal y como recordaban, la asociación se acercó al Ayuntamiento para plantearles la posibilidad de organizar estos talleres «y les pareció una propuesta innovadora. Obviamente hay una parte lúdica, pero también aprenden y, además, se llevan un recuerdo a casa. Nosotros hemos estado encantados, y parece que los niños también», resumía Marina Landa.

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