Una final de Eurovisión con Suecia como favorita y la polémica participación de Israel

Si las principales casas de apuestas aciertan, Suecia se convertiría en la flamante vencedora del festival de Eurovisión. El país eligió al grupo finlandés KAJ con una canción en sueco, 'Bara bada bastu', que mezcla pop y folk con una puesta en escena rítmica que homenajea a la cultura local de las saunas, donde el tono humorístico de la banda contagia al público. Pero todo está por decir en una final del concurso europeo, que se podrá seguir este sábado por la noche en La 1 desde las 21:00 horas, en la que las miradas también estarán puestas en la candidatura de Israel y la participación de la representante española, Melody, que desde su debut en el escenario de Basilea ha ido ganando adeptos hasta colocarse en el puesto 15.

La artista sevillana saldrá en sexta posición con 'Esa diva', un tema que, según defendió en más de una ocasión, habla de igualdad y de aquellas mujeres, madres que madrugan o artistas sin fortunas, que también son divas. Saldrá al escenario del estadio St. Jakobshalle con una propuesta muy diferente dirigida por Mario Ruiz con la que se presentó al Benidorm Fest y promete, además, que para la actuación de la final de Eurovisión habrá una sorpresa inesperada.

«Siempre hay algo nuevo que se va a desvelar, porque nunca las actuaciones son todas iguales», confesó la artista durante una entrevista previa en la propia RTVE. Especialmente pendiente de su actuación en el festival estarán en su pueblo, Dos Hermanas, que se ha volcado con su vecina colocando un pantallón en el auditorio municipal y preparando un gran recibimiento en próximos días sea cual sea el resultado.

Sin embargo, Melody tendrá unos duros rivales en Eurovisión que también se han ido posicionando en las últimas horas como los favoritos. Es el caso de Austria, con Johannes Pietsch, bajo el nombre artístico de JJ, que apuesta por 'Wasted Love', un tema de ópera-pop muy especial donde el joven artista demuestra su gran capacidad vocal. Otras de las opciones para llevarse el micrófono de cristal es la sa Louane con su canción 'Maman'; o Países Bajos con el cantante Claude Kmb y su propuesta 'C'est la vie' que mezcla inglés y francés.

Una edición más desde el comienzo de la guerra en Gaza, los ojos estarán puestos en la candidatura de Israel. El país hebreo, a través de la televisión nacional KAN, eligió a Yuval Raphael como representante, una de las supervivientes del ataque terrorista de Hamás al festival Nova el 7 de octubre de 2023 y que, según relató, estuvo escondida siete horas en un refugio antibombas cerca del kibutz Be'eri y sufrió heridas por la metralla de las granadas lanzadas. Con su canción 'New Day Will Rise' dice que quiere llevar un «mensaje de esperanza», aunque los más críticos han visto intencionalidad política en la letra de este tema.

Precisamente, en la segunda semifinal -que se celebró el jueves- la televisión suiza expulsó a seis personas por llevar banderas de Palestina a Eurovisión, una enseña que se ha prohibido para defender que el concurso europeo sea neutral. Pese a ello, el apoyo al pueblo palestino se coló en la gala y los abucheos a la representante israelí volvieron a sonar, si bien quedaron silenciados en la actuación que se vio por televisión.

La participación de Israel ha vuelto a estar cuestionada. En esta ocasión, un grupo amplio de exrepresentantes de Eurovisión, entre ellos el ganador en 2017, el portugués Salvador Sobral, pidió por carta a la Unión Europea de Radiodifusión (UER) expulsar al país hebreo del festival para «no normalizar ni encubrir sus crímenes» en Gaza. Además, RTVE también reclamó ante el organizador del festival un debate sobre la conveniencia de la participación de Israel.

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