El GBC está ya para los grandes salones

No acusó el líder de la categoría las celebraciones semanales tras el ascenso logrado el miércoles pasado. El Burgos pivotó bajo la dirección de Gudmunsson y apoyado en Fisher, excelente atrás y adelante, para marcar terreno desde el principio, 4-12 (min. 5). El trabajo del interior fue tremendo en defensa sujetando a Vrankic y terminando en canasta todo lo que le llegaba. Y es que el interior del GBC se hubiera ido con un carro de puntos si no llega a ser por la defensa del pívot con pasaporte armenio. Al Gipuzkoa Basket le costaba mucho encontrar tiros liberados, ni Johnson ni Smith se podían levantar con comodidad y apareció en Burgos un jugón como Gonzalo Corbalán que anotó dos triples para mantener la ventaja al sonar la bocina del primer cuarto., 11-21.

Llegaron las rotaciones y en el intercambio de fichas Odriozola encontró la luz con Stürup, cinco puntos para el danés, y Zubizarreta en pista. Vio algo más el aro el cuadro blanquiazul y los tiros de los castellanos esta vez tocaban el hierro en lugar de besar la red. La diferencia fue menguando poco a poco, Carralero salió para dar aire por dentro tocó un par de balones, Motos metio una canasta a final de posesión y todo el GBC en el siguiente ataque se tiró por el suelo para buscar un balón que llegó a las manos de Smith que sin bajarlo anotó su primer triple. El público del Amenebar Arena estalló, silenció a los 300 ruidosos seguidores de Burgos y metía al GBC en el partido, 27-28 (min. 17). Johnson conectó un par de buenas acciones para seguir en el partido.

Quizá otro equipo hubiera izado la bandera blanca. No el Burgos. Por eso es el líder, ha ascendido y solo ha perdido dos encuentros por uno y dos puntos teniendo bola para ganar. Gudmunsson, el asesino silencioso, hizo cinco puntos para los castellanos cogieran aire pero Johnson dejó el partido en un puño al descanso, 34-36.

Y llegó el momento del Gipuzkoa Basket, que empezó con una canasta de un muy atinado Xavier Johnson y dos robos en defensa le dieron a dar la vuelta al partido con un dos más uno de Vrankic, 41-36 (min. 22). Por primera vez el equipo txuri-urin dominaba el luminoso y tocaba defender la exigua ventaja. En poco la derribó el Burgos que primer empató y después fio toda su suerte a Luke Fisher que martilleó el aro una y otra vez. Pero el GBC no se paró y aceptó el cuerpo a cuerpo. Fueron minutos de intercambio de canasta, el Burgos trató de parar el ritmo poniéndose en zona pero Ansorregi y Nicolau encontraron premio en varias acciones, aunque se escapó el equipo castellano un poco con un parcial 0-6, 53-57 (min. 30). En un tercer cuarto donde no hubo triple, la primera canasta del acto final tenía que ser de tres. Ander Martínez acudió a su cita para estrechar el marcador, aunque el Burgos tenía prisa por acabar el partido y se fue a la carrera a por el. Un triple de Stumbris, 58-65 le dio un resquicio de triunfo pero Vrankic con un dos más uno y un triple de Johnson, volvieron a acercar al GBC que hacía la goma, 64-65 (min. 34).

El gigante húngaro Goloman no quería llegar tarde a la hora de comer y apretó el acelerador para los castellanos dieran un golpe que parecía definitivo, 64-72 a 3:55 para acabar. Sin embargo el Gipuzkoa Basket resurgió de sus cenizas, con un triple de Manex desde la esquina, canasta y adicional de Vrankic, 69-72 a un minuto. Cuevas perdió ek baló y dio vida a los blanquiazule.s Johnson clavó un triplazo que levantó a los seguidores del GBC como un resorte. Quedaban 32 segundos y el partido estaba empatado. Los tiempos muertos se fueron sucediendo, Johnson se tiró contra el mundo sin éxito y dejó cinco segundos para Burgos. La jugada fue para Goloman que se envontró con el taponazo de Vrankic. El canandiense estuvo a punto de salir a hombros con un tiro con la zurda faltando cinco décimas que casi entra. Y el partido se fue a la prórroga.