L. G.
Lunes, 26 de mayo 2025, 13:55
La imagen ya es viral: la puerta del avión presidencial francés se abre tras aterrizar en Vietnam y, antes de que el presidente Emmanuel Macron pise tierra asiática, las cámaras captan un instante inusual. El brazo de su esposa, Brigitte Macron, se extiende bruscamente y golpea el rostro del jefe de Estado. Él da un paso atrás, sorprendido, justo cuando se asoma al exterior para saludar a la multitud congregada. Sonríe, como si nada hubiera pasado. Pero algo ha pasado.
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La escena continúa. Emmanuel Macron comienza a bajar las escaleras del avión, recuperando la compostura, le ofrece el brazo a su esposa para descender, pero ella lo rechaza con un gesto seco. La expresión del presidente cambia: la seriedad se instala en su rostro.
El breve vídeo ha comenzado a circular por las redes sociales. «Fue un momento en el que el presidente y su esposa se relajaron por última vez antes de comenzar el viaje, riendo un poco. Fue un momento de complicidad», ha manifestado el equipo de Macron tras el revuelo causado.
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