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A. C.
Viernes, 25 de febrero 2022, 15:32
Gipuzkoa ha dado un paso clave para la conclusión de las obras de la Y vasca en el territorio tras el inicio de los ... trabajos de adaptación del trayecto que une Astigarraga con Irun, mediante la implantación de un tercer carril para el TAV, después de que hace algo más de cuatro años los trabajos se quedaran bloqueados en el túnel de Gaintxurizketa por la quiebra de la empresa que los ejecutaba. Adif informó este viernes de que la UTE formada por Dragados y Tecsa Empresa Constructora se ha hecho cargo de rematar unas labores que ya han arrancado y que tienen un plazo de ejecución aproximado de 34 meses, casi tres años, por lo que se espera que estén finalizados a finales de 2024 o comienzos de 2025.
Las obras de vía supondrán una inversión de 52.983.848 euros (un 14% menos que el presupuesto de licitación), IVA incluido, y darán continuidad a la Línea de Alta Velocidad Vitoria-Bilbao-San Sebastián, permitiendo la conexión con la frontera sa a través de la línea Madrid-Hendaia, según explicó el de Infraestructuras Ferroviarias (Adif). Los trabajos requieren no solo implantar ese tercer carril para que los trenes del TAV compartan espacio con los actuales de ancho ibérico, y puedan circular entre San Sebastián y la frontera de Irun, sino también adaptar túneles, pasos elevados y estructuras metálicas que quedaron pendientes en el primer contrato.
La obra ha comenzado con actuaciones de vía en el entorno de la línea ferroviaria a su paso por el municipio de Hernani. En este momento, todas las obras se realizarán dentro del entorno ferroviario. A lo largo del mes de marzo se desarrollarán las demoliciones de antiguos postes de catenaria, que se concentrarán en la primera semana. Posteriormente, y a medida que la evolución de los trabajos lo recomiende, podrán producirse alteraciones en el tráfico ferroviario, de las que «se informará puntualmente y con antelación» a los s del servicio.
Entre las actuaciones incluidas en el proyecto, el montaje de desvíos en las vías generales tiene el objetivo de aumentar la capacidad actual de la línea en el trayecto Hernani-Irun. Respecto a la excavación de los túneles para ampliación de la sección, al finalizar cada uno de ellos se restablecerá la vía doble, eliminando la vía única que es necesario establecer para centrar la vía en el eje de los túneles y permitir así el avance de la tuneladora. Asimismo, según se vayan completando partes de la obra, se mejorará la situación actual de explotación de los servicios de Cercanías, actualmente en vía única entre Lezo y Errenteria.
52,9 millones, con IVA, es el presupuesto de adjudicación a la UTE formada por Dragados y Tecsa.
34 meses es el plazo de ejecución de esta segunda fase de implantación del tercer carril entre Irun y Astigarraga.
2017 es la fecha en que empezó esta obra, que ha sufrido una importante demora tras la quiebra de la primera adjudicataria.
3 túneles, el de Gaintxurizketa, el de Capuchinos y el de Loiola tienen que adaptarse, además de colocar el tercer carril.
Adif ya ha advertido de que las obras podrán «causar molestias en el entorno urbano, por ruidos y trabajos nocturnos», por lo que lamenta cualquier afectación a los vecinos y solicita su «comprensión». Pero sostiene que la ejecución de las obras es «imprescindible» para llevar a cabo el proyecto y la mejora de las conexiones ferroviarias.
El proyecto consiste en la implantación del ancho mixto en el trayecto comprendido entre Astigarraga e Irun, tanto en las vías generales como en las secundarias que lo requieran, adaptando las instalaciones para la correcta explotación de trenes estándar interoperables (750 metros), al tiempo que se garantiza la adecuada prestación del servicio.
En la estación de Hernani se remodelarán las vías para la implantación de una nueva vía de apartado de trenes de mercancías de longitud estándar interoperable. En el tramo Astigarraga-San Sebastián se implantará el tercer carril desde el enlace en Astigarraga, entre la línea convencional y la línea de alta velocidad, hasta la entrada a la estación de la capital guipuzcoana. Finalmente, en el tramo hasta Irun se implantará el tercer carril entre ambas estaciones. Además de la adaptación de los túneles, estructuras metálicas, pasos elevados, estaciones y apeaderos al ancho mixto.
Este tercer hilo conectará con la nueva red ferroviaria de alta velocidad en Astigarraga, donde precisamente acaba de comenzar el tramo de dos kilómetros hasta Hernani que falta por construirse del ramal guipuzcoano de la Y vasca, después de que las obras quedaran bloqueadas en el túnel de Gaintxurizketa hace cuatro años y medio tras la quiebra de la empresa que la ejecutaba, Coprosa. Es el último de los 17 tramos en los que se dividió el Tren de Alta Velocidad en el territorio. El Gobierno Vasco es el que lleva a cabo esta obra por una encomienda de gestión, y prevé concluirla en 2024. La idea es que todo el tramo guipuzcoano esté operativo para 2025. Dentro de dos años deberían estar culminadas también la reforma de la estación de Atotxa en San Sebastián y el apeadero que se ejecuta en Ezkio-Itsaso.
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