Artajona despide a su vecino David Beriáin en un emotivo funeral

La localidad de Artajona se está despidiendo ya de su vecino David Beriáin, el reportero asesinado el lunes en Burkina Faso, en un emotivo funeral en el patio del colegio público Reina Urraca, situado justo detrás de la entrada principal. Al acto religioso asiste la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite.

Unas 350 personas han ocupado las sillas ubicadas en el patio, que también acoge a gente de pie.

Precisamente, en este centro escolar, de la Apyma le tributaron el pasado miércoles por la mañana un sentido homenaje al periodista, horas antes de la concentración de apoyo que tuvo lugar en la plaza de los Fueros, convocada por el Ayuntamiento de Artajona, y a la que asisieron unas 400 personas.

Nueve sacerdotes, que se han acercado a saludar a la familia, ofician el funeral por David Beriáin. Esta orden religiosa aún conserva el edificio del antiguo colegio, situado junto al cementerio y la ermita de la Virgen de Jerusalén.

Los restos mortales de Beriáin han sido conducidos a las 11 de la mañana al cementerio municipal, donde ha sido enterrado en la intimidad.

El cuerpo del reportero llegó el viernes al filo de las 10 de la noche a la localidad. El coche fúnebre, procedente de Madrid llegó a la villa, donde le esperaban más de un centenar de familiares y amigos que habían ido acudiendo al domicilio familiar a lo largo de la tarde para apoyar a los más íntimos y a su esposa, Rosaura Romero Trejo, que había llegado de la capital unas horas antes. Escoltado por la Guardia Civil, el vehículo con los restos mortales del periodista se detuvo unos minutos unos metros por delante de la casa familiar, ubicada en plena calle Mayor y muy cerca del velatorio, para que los congregados, que se habían colocado a ambos lados de la vía, tuvieran la oportunidad de recibirle con un intenso y cálido aplauso.

Después, el coche fúnebre avanzó unos 150 metros hasta el velatorio, ubicado en la misma calle, y los familiares y vecinos del pueblo le siguieron. En primer lugar iban su padre, Javier Beriáin Arraiza; su madre política, Yvonne Trejo; su esposa, la venezolana Rosaura Moreno Trejo; su madre, Angelines Amátriain Jimeno; su hermano, Eduardo; y su cuñada, Olga Vélez Larrea. Tras ellos, el resto de amigos y allegados.