10 millones para la creación de nuevas startups cooperativas

Corporación MONDRAGON ha hecho una clara apuesta por un modelo de startup diferente. Tiene clara la importancia de que las empresas tecnológicas se queden aquí y por eso ha alcanzado un acuerdo (mediante su Centro de Promoción y su División de Conocimiento) con Ikerlan a través del que pretende movilizar más de 10 millones de euros con el fin de que las startups tecnológicas se transformen en cooperativa mixta, lo que supone una nueva forma de emprendimiento tecnológico.

El acuerdo pretende durante los próximos cuatro años impulsar la transferencia al mercado de los activos tecnológicos del grupo, con el apoyo del Gobierno Vasco, a través del programa Basque Tek Ventures del grupo SPRI.

Se trata de una iniciativa novedosa cuyo objetivo es priorizar el arraigo al territorio, manteniendo la propiedad y la gestión para preservar el conocimiento que generan este tipo de empresas tecnológicas en nuestro entorno e impulsar la creación de empleo cooperativo de futuro.

De momento, han sido dos empresas tecnológicas las que han dado este paso: la pionera fue Orbik, una startup del centro tecnológico Ikerlan que irrumpía en el mercado de la ciberseguridad industrial en 2023. Hace escasas fechas ha seguido el mismo camino Innkia, una empresa que aplica la inteligencia artificial a proyectos industriales y financieros.

Orbik Cybersecurity es la primera startup cooperativa nacida en el seno de MONDRAGON. La empresa ha culminado su hoja de ruta, convirtiéndose en cooperativa, pero este no ha sido el único hito de la compañía en poco más de un año de andadura. Cuenta con un equipo de 20 profesionales y cerró 2024 con una facturación de 700.000 euros. Para 2025 pretende duplicar equipo e ingresos.

La empresa se ubica en las instalaciones del laboratorio Digilab de Ikerlan, en Arrasate, junto al primer laboratorio de ciberseguridad industrial del Estado. Entre sus clientes, destacan empresas del sector eléctrico, así como empresas de bienes de equipo industriales, transporte, máquina herramienta y productos de seguridad.

A todas ellas, Orbik les ayuda a gestionar sus vulnerabilidades y personaliza las soluciones de seguridad para adaptarlas a los desafíos específicos de cada organización. Desde las evaluaciones de riesgos hasta la inteligencia proactiva sobre amenazas, Orbik crea soluciones a medida que fortalecen su infraestructura digital y la protegen contra las amenazas cibernéticas emergentes.

La segunda startup en convertirse en cooperativa ha sido Inkkia, creada por LABORAL Kutxa e Ikerlan en el sector de la inteligencia artificial aplicada a las empresas. Contará con una inversión de seis millones en cuatro años y aspira a facturar diez millones anuales y a contar con 50 trabajadores para 2030. Aplicará la inteligencia artificial a proyectos industriales y financieros. Ikerlan aportará la tecnología en la que se basa la empresa y LABORAL Kutxa implementará las tecnologías de inteligencia artificial en sus procesos. La empresa cuenta con el apoyo de MONDRAGON y el Gobierno Vasco.

La compañía, establecida en Arrasate, dispone de dos líneas de negocio: una de ellas se centrará en la actualización y el desarrollo automático de software mediante inteligencia artificial generativa. La segunda se centrará en productos y servicios para optimizar los procesos internos de las empresas. Innkia desarrollará agentes de IA para automatizar los procesos y los sistemas que aseguren el manejo adecuado de la información confidencial.

La compañía podría ubicar a Euskadi como referente en la inteligencia artificial aplicada a las necesidades concretas de cada empresa y cuenta con una ambiciosa agenda transformadora en los ámbitos de la tecnología, los datos y la ciberseguridad, en los que la inteligencia artificial jugará un papel fundamental. Su aspiración es la de ser referente en un sector para aportar el máximo valor a los clientes.