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Lunes, 3 de febrero 2020
Cuando Amaia García Olasagasti vio el concurso «Recetas que son un tesoro« no pudo evitar recordar un antiguo plato familiar: cabezas de cordero lecha al horno. »Este plato se comía en mi casa cada Nochevieja hasta los años 80, que fue cuando empezaron a llegar los «postizos» como llamaba mi madre a los yernos y a su nuera, ya que a estos les parecía nauseabundo y se dejó de hacer«.
Lo cierto es que las cabezas de cordero son un plato muy tradicional y que muchos consideran un manjar, como lo es para la familia de Amaia. Por ello, a pesar de que a las parejas de sus hijos no les gustaba «mi madre seguía reuniendo una vez al año a sus hijos solteros para degustarlo«.
Cabezas de cordero lechal frescas y pequeñas.
Ajo.
Perejil.
Sal.
Aceite.
Durante 1 hora ponemos a remojo las cabezas con agua y sal para limpiarlas.
Después las ponemos en una bandeja de horno con una mezcla de ajo y perejil.
Rociamos un chorrito de aceite por encima del cordero.
Se mete en el horno previamente caliente durante 45 minutos a 180º temperatura y estarán listas.
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