EH Bildu consigue el apoyo del Sinn Féin para reforzar su conferencia de concejales

El coordinador general de EH Bildu, Arnaldo Otegi, sostiene que la victoria del Sinn Féin «consolida tanto en Irlanda como en Euskal Herria una apuesta por el empleo de las vías políticas y democráticas» de quienes «buscan mayorías sociales para que nuestros respectivos proyectos soberanistas puedan abrirse camino».

Una de las claves del éxito del Sinn Féin es que ha abrazado un explícito perfil social, más alejado de clichés identitarios, según Otegi. Es ese perfil de izquierda el que ha permitido al movimiento republicano irlandés reciclar su fisonomía habitual y mostrarse más abierto hacia otros sectores, incluso de afinidad al laborismo.

Otegi reconoce que en este momento existe una disputa en torno al concepto de soberanía en Europa «entre el soberanismo reaccionario que enarbola la extrema derecha, con criterios autárquicos y postulados de identidad nacional excluyente, y la respuesta de los soberanistas de izquierda, que buscan soluciones de proximidad a los problemas reales que plantea la globalización económica para hacer políticas sociales diferentes. La gente está buscando soluciones en lo más local y lo nacional también en términos de soberanía». «Supone plantear nuestra batalla, más que en términos identitarios, en términos de justicia social y un concepto de soberanía basado en las políticas públicas que favorezcan a las grandes mayorías sociales». En su opinión, «esta ecuación ya es un hilo conductor en Irlanda, Escocia, Cataluña, Galicia y Euskadi» que «explica el avance nuestras posiciones».

La puesta en marcha del gobierno autónomo en Irlanda del Norte tropieza con la negativa de los unionistas a compartir el Ejecutivo del Ulster mientras se mantenga el actual protocolo alcanzado entre la UE y Reino Unido para Irlanda del Norte, que forma parte de forma provisional del mercado único a fin de evitar una frontera física con la vecina República de Irlanda. Precisamente, el primer ministro británico, Boris Johnson, anunció ayer la luz verde a la ley que revocará el encaje de Irlanda del Norte en la UE tras la aprobación del Brexit.

El acuerdo de paz de Stormont ligaba el derecho de autodeterminación al denominado 'principio de consentimiento' que fijaba la necesidad de un consenso previo entre las dos comunidades.