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La consejera vasca de Salud, Gotzone Sagardui, salió este domingo al paso de la denuncia que realizaron la semana pasada médicos y enfermeras de ... Gipuzkoa, cuyos colegios profesionales emitieron un comunicado conjunto alertando de la situación de los Puntos de Atención Continuada (PAC) del territorio, donde a su juicio «se están traspasando todas las líneas rojas». Sagardui respondió que no habrá «recortes» en el Servicio vasco de Salud este periodo estival, solo «adecuaciones». De esta forma, la consejera quiso lanzar un mensaje de tranquilidad a los ciudadanos asegurando que el servicio que presta Osakidetza está garantizado, también en verano, a pesar de que los centros de urgencias del territorio tienen medio millar de turnos aún sin médico que los cubra, once consultorios cerrarán y quince centros reducirán sus horarios.
Según explicó la responsable vasca de Salud, la adaptación a la situación que realiza en Osakidetza en los meses de verano no suponen «un recorte, es una adecuación en función de las circunstancias de esta época estival». «Es una adecuación que seguimos semana a semana y que, en función de las necesidades que se tienen, la vamos adecuando», reiteró, recoge Europa Press.
Sagardui hizo estas declaraciones en Zarautz, donde su departamento realizó la primera de las acciones de sensibilización que se llevarán a cabo este verano en distintas localidades de cara a la protección de la salud y el cuidado del medio ambiente.
El Departamento vasco de Salud apeló a la conciencia ciudadana para avanzar hacia «una Euskadi libre de humo de tabaco» mediante un espectáculo, con el humo como hilo conductor, en el que un creador de pompas de jabón con humo y dos bailarinas de danza contemporánea, representaron una alegoría de la adicción al tabaco.
La actividad contó con la presencia del alcalde de Zarautz, Xabier Txurruka, cuyo Ayuntamiento colaboró en la iniciativa. El acto subrayó la importancia de seguir generando «conciencia, conocimiento y activismo en relación con los perjuicios que genera el humo del tabaco en los espacios que se comparten». Sagardui recordó que las colillas de los cigarrillos son uno de los residuos más comunes en todo el mundo y la basura que más se recoge en playas y orillas de ríos y lagos.
Recordó que los objetivos de este tipo de iniciativas, más allá de velar por la salud pública, son la promoción de las conductas saludables, así como el impulso de la información y la sensibilización sobre los riesgos del tabaco y de la nicotina. Se busca reducir el consumo de esta sustancia, informar y ayudar a todas las personas fumadoras que quieran abandonar el consumo, proteger a la población del humo de tabaco, y generar y mantener entornos limpios, saludables y libres de humo.
Por este motivo, animó a todas las personas a título individual, a que contribuyan a generar entornos más sanos, y sean también un ejemplo positivo para los jóvenes. Sagardui afirmó que no existe una forma segura de consumir tabaco o nicotina porque tanto los formatos tradicionales como los nuevos productos (vapeadores, cigarrillos electrónicos o los productos para consumir tabaco por calentamiento) entrañan riesgos para la salud.
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