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Cerca de medio centenar de mujeres víctimas de violencia machista reciben protección especial por parte de la Ertzaintza en Gipuzkoa, y más de doscientos en ... Euskadi. Son los casos más extremos. Si en la actualidad las diferentes comisarías vascas cuentan con 5.370 expedientes -2.013 en el territorio-, de ellos 233 son situaciones calificadas como de «riesgo especial» o «alto riesgo», esto es, que conllevan labores de vigilancia cuando las afectadas salen a la calle y, en el segundo de los escenarios, además de escolta se activan pulseras o relojes que facilitan la geolocalización permanentemente. En Gipuzkoa la comisaría de Eibar es la que más situaciones graves atiende, un tercio del total del territorio, 12 de 44.
Con el objetivo de reducir la carga de los ertzainas destinados a la unidad de violencia de género y doméstica, el departamento vasco de Seguridad aumentará un 40% la plantilla que hace seguimiento a estos casos, que pasará de setenta a cien agentes en Euskadi, lo que supone trece ertzainas más en Gipuzkoa. Así lo anunció este miércoles el área que dirige Josu Erkoreka, que reveló que ahora mismo hay activos en el conjunto del País Vasco 5.370 expedientes sobre violencia de género. La evaluación del riesgo en cada caso los divide en cuatro niveles -básico, moderado, alto y especial- y son el 4,3% los que han sido situados en los dos rangos superiores. Son estos casos los que la Ertzaintza gestiona de forma exclusiva por las necesidades de protección especiales de estas víctimas. En el resto de situaciones colaboran con la Policía Municipal de los diferentes municipios.
El mayor número de expedientes del territorio los gestiona la comisaría de Donostia, donde en estos momentos hay 462 casos activos. Para reducir esta carga de trabajo, el departamento de Seguridad destinará tres nuevos agentes a la unidad de la capital, así como otros tres a Irun. Deba-Urola (Bergara) contará con dos ertzainas nuevos para los casos de violencia machista y doméstica, mientras que las ertzain-etxeas de Eibar, Hernani, Oria (Tolosa), Errenteria y Urola-Kosta (Zarautz) tendrán uno más cada una.
El aumento de agentes que se encarguen de los casos de violencia sexual y doméstica lleva implícito una disminución de la carga de trabajo, aseguran desde el Gobierno. Así, cada agente dedicado a esta materia va a ver reducida su carga de trabajo, de media, en un 29,33%. En concreto, se pasará de los 75,6 casos de media por ertzaina a 53,7 expedientes. A este cuerpo especial Seguridad añade la labor de los agentes de Protección Ciudadana, que dedica «una parte de su jornada laboral diaria a actuaciones y seguimiento de los casos de violencia contra las mujeres de su demarcación».
Esta medida se suma a «otras más estructurales y organizativas que irán en la misma dirección», según explicó el consejero de Seguridad, Josu Erkoreka, en declaraciones a una radio. También se está acometiendo la revisión de la herramienta para evaluar el riesgo de las mujeres que son víctimas de violencia machista que se había diseñado «hace tiempo», con el objetivo de «ponerla al día y para incorporar los indicadores que han aflorado» desde su puesta en marcha.
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Además, también se actualizará la herramienta que se utiliza para evaluar el riesgo de las mujeres que son víctimas. «Se elaboró en la UPV hace tiempo y hace meses encomendamos que actualizaran para ponerla al día. También se potenciará la coordinación policial», dijo Erkoreka.
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