La mitad de los vascos tiene menos hijos de los deseados por motivos económicos y laborales

Este estudio correspondiente al mes de mayo y que fue realizado entre los días 28 de marzo y el 1 de abril a 1.202 ciudadanos, deja otro dato para la reflexión: en el País Vasco «ha crecido la actitud renuente a la maternidad y paternidad». Según indica esta encuesta, en base a la situación personal y opiniones respecto a temas relacionados con la demografía, un 10% de la población afirma que «le gustaría tener o le habría gustado tener 0 hijos/as». Este porcentaje era del 5% hace seis años. Entre los jóvenes de 18 a 29 años esta afirmación es suscrita por el 15% de la población vasca.

El resto de indicadores relacionados con la natalidad también se ven condicionados con los problemas económicos, conciliación laboral y familiar y motivos de salud como la infertilidad. Por ejemplo, preguntados sobre la edad que se considera más adecuada para tener el primer hijo, la media de todas las respuestas obtenidas sitúa esta referencia en los 28 años. Sin embargo, la edad media con la que las mujeres vascas tienen su primer hijo o hija en Euskadi es de 32,6 años.

Otra de las razones esgrimida por los encuestados por la que se tiene descendencia más tarde de lo deseado es el hecho de que los jóvenes se emancipan a una edad más tardía. «Las y los vascos opinan que la edad media ideal para emanciparse son los 25 años. Sin embargo, la edad media de emancipación de la juventud vasca es de 30,2 años», señala este estudio que presentó este lunes Jonan Fernández, secretario general de Transición Social y Agenda 2030 del Gobierno Vasco.

Más allá de los datos que señalan motivos laborales y económicos para no poder tener los hijos deseados, además de que los más jóvenes se muestran cada vez más reacios a tener descendencia, la ciudadanía deja patente que, entre los retos de futuro planteados, los problemas demográficos son considerados como uno de los más importantes, «con un 7 sobre 10 en la escala de gravedad». Esta preocupación solo se sitúa por detrás de las desigualdades sociales y la pobreza.

Las soluciones que plantea la ciudadanía tienen dos orientaciones principales. Primero, se sitúan en el empleo -creación de puestos de trabajo (23%) y que ese empleo sea calidad (14%)-; y, segundo, apoyo a la construcción de familias, con ayudas económicas (17%), y fomento de la natalidad (12%).

El envejecimiento de la población es otro de los parámetros que alarman a los vascos. Dos tercios de los encuestados creen que la llegada de población inmigrante puede ser también parte de la solución al problema. Una proporción similar de la ciudadanía considera que la medida más eficaz para hacer frente a la posible falta de mano de obra en el futuro consiste en apoyar que se tengan más hijos.

Este informe fue difundido este lunes por el Ejecutivo vasco en el marco de la jornada 'El reto demográfico y los nuevos modelos de familia' organizada por Jakiunde y celebrada en Vitoria.

Todas estas cuestiones se discutirán el próximo día18 en un pleno monográfico que tendrá lugar en el Parlamento Vasco sobre reto demográfico. En este sentido, el secretario general de Transición Social y Agenda 2030 ha manifestado este lunes que «este debate constituirá una buena oportunidad para completar el proceso abierto. Una vez conocidas las resoluciones, aportaciones y propuestas presentadas en la Cámara, la previsión es proceder en las semanas siguientes a su toma en consideración e incorporación a la estrategia que finalmente se lleve a aprobación».