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El programa 'Akelarre' de Euskal Telebista ha vuelto como se fue: dando mucho que hablar. El programa de humor se estrenó el pasado viernes con muchas caras nuevas y más de una sorpresa. Eso sí, el primer episodio del programa no dejó indiferente a nadie, ya que volvió a presumir de ese carácter irreverente y gamberro del que hizo gala el año pasado… y que le valió más de una polémica, esta vez con Nerea Garmendia como gran protagonista.
En esta ocasión, 'Akelarre' volvió a ETB2 con una ausencia muy notable: la de Valeria Ros. Y es que a la presentadora y colaboradora de 'Zapeando' (LaSexta) le sustituyen esta temporada tres caras bien conocidas en la cadena autonómica vasca: Nerea Garmendia, Ana Goitia y Tania Llasera. Y estas no dudaron lo más mínimo a la hora de imprimir su sello más personal y descarado con los primeros invitados de la temporada: las cantantes Izaro Andrés y La Basu, Jordi Sánchez y la sex coach Lola Dacosta.
Uno de los momentos más divertidos en el estreno de esta segunda temporada tuvo como protagonista a Nerea Garmendia, multifacética actriz y presentadora que se dio a conocer en televisión por su papel en 'Vaya Semanita'. A la de Beasain, en un momento dado, le tocó ser víctima de las preguntas de sus compañeras y no se cortó lo más mínimo, siempre con su carácter extrovertido habitual. «Vosotros me preguntáis y yo respondo lo que me da la gana, o sea, lo que me salga de las te... Que, por cierto, tienen nombre: Txindoki y Aizkorri. Claro, como soy giputxi», explicó ante las risas del público. La actriz guipuzcoana, muy cómoda en su papel de agitadora, no se conformó y animó a sus otras dos compañeras a hacer lo propio. Y, ni corta ni perezosa, le espetó a Ana Goitia: «¿Y cómo se llaman las tuyas?».
La que fuera colaboradora del programa en la primera temporada cogió el guante y respondió también sin tapujos. «Hombre, viendo las tuyas, las mías podrían ser Everest y K 2.000 (K2). En realidad, es que tienen vida propia. Son Paty y Sussi. Y es que son casi personas. Claro, con este bulto…», afirmó ocurrente en vista de su físico más corpulento.
El público de 'Akelarre' volvió a reír con ganas aunque, esta vez, a la espera de la gracia de turno de la tercera en discordia, la bilbaína Tania Llasera. Ella tampoco dudó en echarle humor al asunto, desvelando incluso el mote que tenía antaño. «Las mías no tienen nombre, una es famosa y otra es anónima. La izquierda salió en televisión hace años, de hecho me llamaban Tetania. Y la derecha es anónima», explicó, antes de rememorar la propuesta de una por entonces muy conocida publicación. «Cuando Interviú existía, antes de que lo cerrasen, había un chico llamado Guillermo que me llamaba todos los meses y me decía: 'Venga, va, este es tu mes. Vas a salir en portada. Tranquila, que solo se te va a ver la que ya es conocida'», recordó con su gracia habitual.
'Akelarre', el alocado espacio de humor de ETB2, vio la luz la temporada pasada con Valeria Ros como cara visible. Y lo hizo envuelto en la polémica y entre acusaciones que tildaban al programa de atacar a la cultura vasca. De hecho, la controversia fue más allá e incluso se erigió en motivo de discusión política. La propia EH Bildu consideró que en él se ridiculizaba desde «una perspectiva española» y el debate alcanzó incluso el Parlamento Vasco porque para la coalición soberanista «miles de espectadores podrían sentirse ofendidos con el enfoque del programa».
El propio director de EiTB, Andoni Aldekoa, tuvo que salir en defensa del espacio, haciendo hincapié en que el talk show era un «programa de humor que como tal debe ser entendido y está concebido desde el amor y el respeto a los elementos de referencia y pertenencia de la sociedad vasca».
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