Euskadi y Navarra gestionarán el Ingreso Mínimo Vital tras un acuerdo entre Sánchez y el PNV

El PNV ha anunciado este miércoles que ha alcanzado un acuerdo con el Gobierno de Pedro Sánchez para que las instituciones vascas y navarras gestionen de forma «exclusiva» el nuevo Ingreso Mínimo Vital que el Consejo de Ministros prevé aprobar este viernes. Este pacto permitirá que el Gobierno Vasco y el Ejecutivo foral navarro puedan integrar el Ingreso Mínimo Vital en sus sistemas de protección ya existentes, de tal forma que la nueva figura no choque con otros instrumentos como la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) vasca.

Con este «importante» pacto, en palabras del PNV, Sánchez restablece los puentes con el partido que lidera Andoni Ortuzar, que se habían visto seriamente dañados la semana pasada tras el acuerdo que PSOE y Unidas Podemos alcanzaron con EH Bildu para derogar la reforma laboral, una maniobra que descolocó al PNV. Los jeltzales, sin embargo, no pusieron el grito en el cielo porque llevaban semanas negociando con el Ejecutivo de Sánchez la adecuación del Ingreso Mínimo Vital a las realidades vasca y navarra, en un acuerdo que se ha acabado firmando este miércoles por la mañana.

El portavoz del PNV en el Congreso de los Diputados, Aitor Esteban, ha asegurado este miércoles por la tarde que el grado de confianza en el Gobierno Sánchez está «algo más sereno» tras este traspaso. Ha comparecido en una rueda de prensa celebrada en la sede de Sabin Etxea de Bilbao para explicar el acuerdo alcanzado, que se aprobará en el Consejo de Gobierno del próximo viernes.

Preguntado por dónde está la «confianza» ahora del PNV en el Gobierno del Estado, después de que Ortuzar asegurara que «el depósito de confianza» de su partido en Pedro Sánchez tenía «la luz de reserva encendida» por el acuerdo con EH Bildu sobre la derogación de la reforma laboral, el diputado jeltzale ha afirmado: «Nuestro grado de confianza está un poco más sereno que ayer, pero vamos a ver cómo avanza todo esto, cómo avanzan todos los acuerdos y cómo avanza la legislatura». Esteban ha rechazado que el acuerdo de la transferencia del IMV esté vinculado al apoyo de los jeltzales a la prórroga del estado de alarma, y ha asegurado que todavía no tienen decidido cuál será su voto al respecto.

Este miércoles al mediodía, el PNV ha emitido una nota en la que anunciaba que ha conseguido «la transferencia del Ingreso Mínimo Vital a la CAV y Navarra». El acuerdo firmado entre el Gobierno español y el partido jeltzale fija el 31 de octubre de 2020 como fecha límite para materializar este traspaso. El texto quedará plasmado en el Real Decreto Ley por el que el Consejo de Ministros aprobará este viernes el Ingreso Mínimo Vital.

Según el pacto, la Comunidad Autónoma Vasca y la Comunidad Foral Navarra asumirán las funciones y los servicios correspondientes al INSS (Instituto Nacional de la Seguridad Social) en relación al Ingreso Mínimo Vital. Hasta que la transferencia sea un hecho a finales de octubre, las istraciones competentes acordarán una encomienda de gestión para realizar las actuaciones que permitan atender a los y las beneficiarias de la medida.

El PNV ha destacado en su comunicado que este pacto «refuerza la bilateralidad Estado-CAV y Estado-Navarra y apuntala el autogobierno de los territorios históricos», al ampararse en la especificidad de las Haciendas Forales. De este modo, además, «se encauzan los posibles conflictos jurídicos que podían derivarse de la colisión del IMV con la RGI vasca o la Renta Garantizada navarra». El IMV será una renta base no complementaria a la que puedan implementar la CAV y Navarra en ejercicio de sus competencias.

En el texto acordado se especifica también que cualquier referencia a la Comunidad Autónoma Vasca o a la Comunidad Foral de Navarra en el Decreto Ley de IMV deberá contar con acuerdo previo entre las partes firmantes. El PNV, por su parte, se compromete a votar favorablemente el Real Decreto Ley por el que se apruebe el Ingreso Mínimo Vital.

El partido que lidera Ortuzar ha destacado que «se trata de un gran acuerdo para la ciudadanía de la CAV y de Navarra, que ven blindados sus eficaces sistemas propios de protección social, que seguirán siendo gestionados por sus instituciones». Este pacto, además, «supone un logro político en un contexto de tentaciones recentralizadoras y demuestra, una vez más, la eficacia del PNV en la defensa de los intereses de las vascas y de los vascos en Madrid».